Remachadoras manuales

La remachadora manual es una herramienta articulada que sirve principalmente para unir dos o más materiales por medio de remaches de presión de forma segura y eficaz, pudiendo utilizar remaches de acero, de aluminio, cobre o mixtos. Las piezas a unir suelen ser planas, pero también es posible unir elementos con cierta anchura ya que hay remaches de diferentes tamaños y remachadoras que permiten trabajar con elementos grandes. Las remachadoras son herramientas robustas y resistentes fabricadas generalmente en acero forjado o aluminio de alta calidad, brindando aplicaciones rápidas y seguras con un práctico sistema de cambio de puntas.

La remachadora manual consta de un cuerpo con dos brazos y de una boquilla, un elemento extraíble e intercambiable en diferentes medidas para adaptarse al diámetro del remache que más se ajuste al trabajo que vayamos a realizar.

Su funcionamiento se inicia al hacer presión cerrando los dos brazos de la remachadora manual, como si de unos alicates se tratara. Existen remachadoras en los que los dos brazos son abarcables con una sola mano, y otras en que necesitaremos una mano para cada brazo. Cerrando los brazos de la remachadora estaremos ejerciendo una fuerza de tracción sobre un vástago en el que va insertada una cabeza (el remache en sí) y que se ha colocado previamente atravesando las dos piezas que hay que unir. Estas dos piezas deben estar perforadas con antelación para poder introducir el remache en sus agujeros. La cabeza del remache terminará por deformase con la presión consiguiendo trabar y unir las dos piezas. El vástago se romperá cuando alcance el punto de unión de los dos elementos.

Como comentábamos, para adaptarse a la anchura de los distintos remaches, las remachadoras manuales llevan boquillas intercambiables de diferentes tamaños que suelen guardarse en el mismo cuerpo de la remachadora junto a la llave que permitirá enroscar y desenroscar las boquillas.